un sector minoritario del Ejército coordinándose con grupos 'paras' intentan reproducir lo que ocurrió con la Unión Patriótica.
40 defensores de derechos humanos y líderes comunitarios han sido asesinados en Colombia en lo que va de año y todavía no existe ninguna condena contra los responsables.
Se han firmado unos acuerdos para combatir y erradicar el paramilitarismo, pero ese trabajo está sin hacer.
Existe un riesgo de que algunos grupos intenten sabotear el acuerdo con las FARC.
Hay un sector del Ejército, por fortuna muy minoritario, que está conspirando contra el proceso de paz y coordinándose con grupos 'paras' para intentar reproducir lo que ocurrió con la Unión Patriótica.
Quiero dejar claro que la actitud de las instituciones militares ha sido unánime, transparente y eficaz en favor del proceso de paz.
No me cabe ninguna duda que estas disidencias no alcanzan a la cúpula militar, Pero es un ejército muy grande, con más de medio millón de efectivos, y existe un riesgo de disensión, así sea un porcentaje muy reducido.
Lo que ha pasado estos días en el Urabá y el Chocó (al noroeste del país, entre las regiones Caribe y Pacífico), es un despliegue de grupos paramilitares con toda tranquilidad sin intervención alguna del Ejército es preocupante.
La pelota está en el tejado del Gobierno, antes del plebiscito debería aplicar las medidas de seguridad acordadas.